Trucos para Conservar tus Embutidos Correctamente

Sin comentarios marzo 7, 2018

A medida que comienza a acercarse el calor, también aumenta la posibilidad de ingerir alimentos en mal estado. En muchos casos, como los huevos frecos o la mayonesa, las indicaciones para su correcta conservación se encuentran bastante extendidas, y prácticamente todo el mundo conoce sus métodos de conservación básicos. Sin embargo, existe una lista de aliementos cuyos cuidados de conservación básicos pueden ser desconocidos o la duración apta no se encuentra del todo clara. Este es el caso de los embutidos, cuyo consumo se considera ya una tradición dentro de España, pero que mucha gente desconoce aún sus métodos de conservación más básicos.

A lo largo de este post vamos a enumerar diferentes consejos para el mantenimiento de los embutidos para que siempre podáis consumirlos en su estado más óptimo posible.

Consejos para Conservar Embutidos

Trucos Conservar Embutidos

En primer lugar, es importante diferenciar el tipo de producto que vamos a conservar. Podemos encontrarnos con embutidos frescos, secos o cocidos.

Los Embutidos Frescos pueden durar hasta un máximo de 6 días conservados en frío. Por lo tanto, hay que procurar que se encuentren a una temperatura de entre 2 y 8 grados, además de estar siempre cubiertos un envase y/o ubicados dentro de un estante propio. En este grupo encontramos por ejemplo el chorizo fresco. Truco: Aprovecha el propio envase del embutido para evitar la contaminación cruzada dentro de la nevera, y gúardalo en un estate propio.

En cuanto a los Embutidos Secos, han experimentado un proceso previo de deshidratación, por lo que resulta más difícil que alberguen bacterías. Se pueden conservar en un lugar fresco y seco, que se encuentre protegido de la luz solar. Un buen ejemplo de este grupo puede ser el salchichón. Truco: Puedes taparlos con su propio envase y dejarlos en la mesa listos para picar. También los puedes guardar en la nevera protegidos por un film transparente para que duren más tiempo.

Por último, los embutidos cocidos tienen un proceso de cocción en agua caliente, por lo que también necesitan conservarse con frío, con indicaciones similares a los embutidos frescos. Entre estos embutidos destaca la morcilla. truco: Envuelve el embutido con papel de aluminio y colócalo en un plato dentro de la nevera. A la hora de degustarlo retira el film y caliéntalo en el microondas.

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